La Navidad: una época en la que tradición y modernidad se dan la mano

¡Parece mentira ya hemos casi terminado en 2015! pero antes como cada año viviremos Navidad y San Esteban (el 26 de diciembre en Cataluña continúan las comidas familiares). La Navidad es la fiesta religiosa por excelencia en la tradición cristiana. Ahora bien, sea religioso o no, hay algo que se puede afirmar: en Navidad las familias se reúnen y eso hace que sean las fiestas con más impacto emocional ya que todos tenemos asociado un recuerdo u otro. Prueba de ello es que, entre los adultos, es una celebración que genera alegría y nostalgia a partes iguales.

Son unos días en los que es importante medir la cantidad de regalos que nuestros hijos pedirán al Paranoel o los Reyes Magos. Para evitar excesos os aconsejamos mirar con vuestros hijos los catálogos de regalos, poniendo límites a sus peticiones, y ayudarles a escribir la carta: es una ocasión para educar, pero también, y esto no es menor, de contagiarse de la inocencia mágica de los pequeños de la casa. La ilusión, pues, debe ser el combustible de nuestra vida.

En unos días en casa recibiremos o nos recibirán familiares se vuelve más importante que nunca tener hogar preparada y confortable. Así, asegúrese de que los sillones están preparados, el horno está limpio y en pleno funcionamiento para hacer la pava de Navidad. De la misma manera, es importante comprobar que la mesa se puede extender correctamente por si su familia es extensa. Otro aspecto a tener en cuenta es que sí compráis árbol de Navidad este no sea natural ya que es un desperdicio ecológico tenerlo sólo unos días y tirarlo. Así creemos que es mejor que sea artificial. El día de Navidad todo puede ser perfecto pero, en todo caso, debemos procurar que no haya errores logísticos ... es un día que vale la pena disfrutarlo rodeados de nuestros y recordando a quien ya no está: y es que la vida aunque puede tener circunstancias duras vale la pena vivirla.